Mi experiencia en el Japón fue durante el curso de DDMI–1 desarrollado en el Yokohama Kenshu Center. La organización del curso por parte de los directivos de AOTS del Japón, el contenido del programa, las clases impartidas y analizadas individualmente, las visitas a las empresas e industrias, los instructores de los cursos que en su mayoría eran los mismos propietarios de las grandes compañías, las personas encargadas de la traducción, coordinación de actividades y eventos, la calidad de los servicios tanto en las aulas como en las instalaciones edilicias, fueron sin duda alguna y en su totalidad de calidad excepcional, demostrando con ello el por qué del posicionamiento del Japón como potencia mundial.

La beca fue un sueño hecho realidad en el mes de Octubre del 2009, el haber llegado a un país de primer mundo, de la calidad tecnológica y avance científico con los que cuenta esta potencia, desde mi llegada sólo recibí buenas atenciones y mucho respeto de parte de los japoneses debido a su gran cultura, educación y valores morales que los realzan constantemente. Me sorprendió sobremanera el respeto que se le da a la gente de la tercera edad en todos los ámbitos.

Tengo la esperanza de que más personas accedan a estos cursos de actualización, ya que poseen tanto valor por su contenido y por el país en donde se realizan, la modernidad y la calidad puesta en todas las actividades, son la gran motivación de todos los participantes.